Srinivasa Ramanujan fue un matemático autodidacta indio que, con una mínima educación académica en matemáticas puras, hizo contribuciones extraordinarias al análisis matemático, la teoría de números, las series y las fracciones continuas. Ramanujan desarrolló inicialmente su propia investigación matemática en forma aislada, que fue rápidamente reconocida por los matemáticos indios.
Ramanujan consideraba que sus facultades provenían de una deidad familiar y estaba convencido de que era una diosa quien le dictaba en sueños sus descubrimientos. Ramanujan era un hombre muy espiritual y estaba inmensamente conectado con los dioses y los sueños. En múltiples ocasiones, confesaba que lograba resolver los problemas porque la diosa Namagiri se los mostraba en sueños en forma de metáforas y fábulas.
Su caso es un espectacular ejemplo de cómo el lenguaje matemático está inscrito en el cerebro de todos los seres humanos. De la misma manera que Mozart visualizaba la música, este joven indio tenía la capacidad de hacer brotar de su interior fórmulas matemáticas con las que trataba de explicar el mundo. Procedente de una familia humilde, Ramanujan formuló sus primeros teoremas a los 13 años. Y a los 23, ya era una reconocida figura local en la comunidad matemática india, a pesar de que no tenía formación universitaria. Había sido rechazado en la prueba de acceso en dos ocasiones, por dejar sin respuesta todas aquellas cuestiones que no estaban relacionadas con las matemáticas.
Sin embargo, este suceso no detuvo su formación, que a partir de 1906 se volvió estrictamente autodidacta. En este período, Ramanujan tenía una gran obsesión, que le perseguiría hasta el final de sus días: el número pi. De su mano salieron cientos de formas distintas de calcular valores aproximados de pi. Solo los dos cuadernos que escribió antes de llegar a Cambridge acumulan 400 páginas de fórmulas y teoremas. Gracias a los cimientos teóricos que Ramanujan colocó hace un siglo, potentes ordenadores han calculado los 10 primeros billones de decimales del número pi. Llegar más lejos se considera una prueba de fuego en el mundo de la computación.
Para el año de 1912 envía sus trabajos a muchos matemáticos ingleses pero solamente capta la atención del matemático y profesor Godfrey H. Hardy, quien lo invita a Inglaterra a trabajar con él y además será el director de su tesis. Su performance, especialmente en lo que a teoría de números respecta, fue tan buena que a los tres años ya integraba la Royal Society de Londres.
En 1919 volvió a su tierra natal, donde murió en los siguientes meses con solo 32 años. Esta muerte temprana le impidió terminar las demostraciones completas de sus anotaciones. Durante su corta vida, Ramanujan fue capaz de compilar casi 3900 resultados independientes (en su mayoría identidades y ecuaciones). Casi todos sus hallazgos se han demostrado válidos, aunque algunos ya eran previamente conocidos. Logró resultados que eran a la vez originales y muy poco convencionales, como los números primos de Ramanujan y la función theta de Ramanujan, que a su vez han inspirado una gran cantidad de investigaciones.
Fuentes: Wikipedia, bbvaopenmind.
Related Posts
Ciencia
5/26/2019
0